La época de la información, de la integración y de la desintegración


La vorágine cotidiana impide muchas veces detenernos, mirar para el costado y analizar la interacción con el otro. 

Muchas veces damos por sentado que todo el mundo maneja medianamente las redes sociales, porque es lo normal, lo natural, lo que sucede, lo que hemos absorbido.

Estamos inmersos en un cambio de época, una nueva socialidad, donde la tecnología y los usuarios coevolucionan permanentemente. El veloz avance tecnológico genera turbulencia, nosotros ya estamos ahí y cada vez más nos atropella ese movimiento muchas veces para bien, otras no tanto. 

El nuevo su paradigma social de desarrollo tiene centralidad en la tecnología y en la información, estamos en pleno escenario de traspaso hacia la época del informacionismo, 

Pero y los que quedan afuera ¿? 

Como todo cambio de época, la naturaleza de las transformaciones de los cambios está bajo un cuestionamiento irreversible. Y la revolución tecnológica que nos engloba está aportando diversas y profundas transformaciones en los procesos de producción en las relaciones de poder, en la experiencia humana y la cultura.

La aparición de las redes sociales ha generado cambios en las relaciones emocionales, en aspectos de la economía, de la cultura, de la sociedad en general. 

Todo avanza y cambia rápidamente. Y como cambian los usuarios, las conectividades sociales también dejando en el camino aquello que fue decantado por el consumidor.

Por eso los medios sociales privilegian, ante todo, la popularidad, "los me gusta de facebook", "los seguidores  de instagram", etc. 

Hay un mix entre la expresión personal y la autopromoción, y eso de mercantilizar la identidad propia como un bien que hay que vender o consumir.

No solo las redes, sino la casa inteligente, el auto mágico, la robotización de la vida, etc. 

Pero hay gente que va quedando en el camino, se está perdiendo un campo de la información y del nuevo perfilamiento de las emociones. Otros dirán están salvados al estar aislados de “ese ruido”. Sin embargo esto conlleva a una desintegración social.

Muchos usuarios que de la pasividad y la relación vertical con los proveedores de productos o servicios, han "horizontalizando" esa relación. Pero otro no.

En ésta columna quería hacer hincapié en la generación llamada: "Baby boomer", es decir el conjunto de personas que nacieron durante el baby boom, que sucedió en algunos países anglosajones, en el período contemporáneo y posterior a la Segunda Guerra Mundial, entre los años 1946 y 1965.​ 

Muchos de ellos están muy familiarizados con las nuevas tecnologías, pero otro tanto no.

Entre quienes utilizan las redes sociales de la generación baby groom, prefieren las más instaladas, y donde pueden relacionarse con sus familias, amigos, y/o encontrar gente. En el  esquema gráfico vemos cuales son las redes que más utilizan y cuáles menos entre los integrantes de ésta generación

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 Termino ésta nota, con un caso más que cercano,  mi padre que encaja en ésta generación, no usa w.sapp, tiene un teléfono prehistórico, le cuesta aprender, también quizá está negado, se está perdiendo cosas, tanto en agilidad en su trabajo, como en el compartir imágenes, videos, charlas a distancia. Quiere decir que los cambios de época lo han aislado.

Es lógico que todo cambio de época traiga aparejado situaciones, lo importante es ver cómo podemos colaborar para que el avance tecnológico sea integrador…

abrazos!

 

 


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